Publicado el 26/01/2022

Qué se debe tener en cuenta a la hora de escanear en 3D un objeto

Actualidad

Los escáneres 3D son ampliamente utilizados gracias a sus posibles aplicaciones en sectores como el industrial, la medicina, el sector dental, o el campo del entretenimiento o el arte entre otros.

Los escáneres 3D más utilizados en la actualidad son los escáneres de luz estructurada por su versatilidad gracias a que combinan una excelente resolución, una alta precisión, alta velocidad de adquisición y bajo coste, aunque existen muchos más tipos de escáneres 3D, como los de triangulación, los de tiempo de vuelo, o los escáneres 3D de contacto.

A la hora de escanear un objeto, se deben tener en cuenta distintos factores que harán que el usuario deba escoger un tipo de escáner 3D u otro, o que incluso requiera el uso de herramientas o productos adicionales para conseguir un resultado óptimo.

Tipo de objeto

Dentro de algunos sectores se pueden encontrar escáneres 3D específicos, como pueden ser los escáneres 3D intraorales (orientados a obtener modelos del interior de la boca de los pacientes) o los escáneres de laboratorio. Ambas opciones permiten a los profesionales del sector dental fabricar piezas personalizadas, adaptadas a las necesidades y a la morfología de sus pacientes de forma rápida y con gran exactitud.

Escáner 3D intraoral.

Imagen 1: Escáner intraoral. Fuente: Shining 3D.

En el sector de automoción, por ejemplo, se pueden utilizar escáneres con contacto para algunas aplicaciones, pero este tipo de escáneres 3D no serían de utilidad en el sector artístico, donde podrían causar daños a las obras de arte a causa de la fricción del palpador con la superficie. Para saber más acerca de tipos de escáneres, se recomienda consultar el artículo escáneres 3D.

Además de los equipos de escaneado 3D especializados, existen otros más versátiles, aptos para diversas aplicaciones. Un ejemplo de ello, son los escáneres Calibry de Thor3D, escáneres de mano profesionales basados en la tecnología de luz estructurada.

Vídeo 1: Presentación de escáneres Calibry. Fuente: Thor3D.

Tamaño del objeto

A la hora de escanear en 3D un objeto, las dimensiones del mismo también son un factor muy importante. El usuario debe tener en cuenta que debe adaptar la elección del equipo según el tamaño del objeto, pues requerirá unas características u otras.

En este sentido, si el objeto a escanear es de tamaño reducido, el usuario debe utilizar un escáner 3D con un tamaño mínimo de escaneado compatible con el tamaño del objeto. Teniendo esto en cuenta, el usuario podrá escoger si prefiere un escáner de mano o bien un escáner de mesa, y valorar el uso de una plataforma giratoria en este último caso.

Proceso de escaneado 3D de un objeto pequeño.

Imagen 2: Escaneado 3D de un objeto de tamaño reducido con EinScan SE. Fuente: Shining3D.

El usuario también debe tener en cuenta qué grado de detalle requiere. Esto puede variar en función del uso que vaya a tener el archivo escaneado del objeto.

Si el objeto a escanear es de gran tamaño, el usuario debe emplear un escáner 3D con un tamaño máximo de escaneado adaptado a las medidas del objeto.

Proceso de escaneado 3D de un objeto de gran tamaño.

Imagen 3: Escaneado 3D de un objeto de gran tamaño con Calibry. Fuente: Thor3D.

En este caso, también es importante la distancia de escaneado 3D que permite el equipo de escaneado. Es decir, el usuario debe tener en cuenta que va a necesitar un espacio de trabajo que le permita moverse alrededor del objeto a la distancia que requiera el escáner 3D.

Material del objeto

Además de todos estos datos, el usuario debe tener en cuenta de qué material está fabricado el objeto a escanear en 3D. Este factor es fundamental puesto que existen superficies transparentes (como cristales) o muy brillantes, que los escáneres 3D no logran captar con exactitud. Esto se debe a que la luz atraviesa las superficies transparentes, mientras que se refleja sobre aquellas brillantes, que actúan como espejo. De esta forma, no permiten que el escáner 3D cumpla su función correctamente.

Actualmente, empresas como AESUB han desarrollado sprays de escaneado 3D como solución a este problema, ayudando a reducir las diferencias de color, reflejo, textura y cualquier posible heterogeneidad que afecte negativamente al proceso de escaneado 3D.

Spray de escaneado 3D AESUB.

Imagen 4: Spray de escaneado 3D AESUB. Fuente: AESUB.

AESUB cuenta con distintos tipos de sprays según las necesidades del usuario, como AESUB White y AESUB Blue.

Ambos productos crean una capa mate muy fina y homogénea que ayuda a la óptima detección del objeto a escanear en 3D. Estos sprays resultan ideales para zonas transparentes, reflectantes o con hendiduras.

Mientras que AESUB White es un spray de escaneado 3D no evaporable, ASUB Blue, por el contrario, es un spray de escaneado 3D evaporable que, pasado un tiempo, se evapora completamente sin dejar residuos en la superficie de los objetos. AESUB Blue no contiene pigmentos y, por tanto, evita la contaminación por pigmentos en laboratorios, plantas de producción, equipos y usuarios.

Así, el usuario debe tener en cuenta diversos factores a la hora de realizar el escaneado 3D de un objeto para conseguir un resultado óptimo. Para ello, debe escoger el equipo adecuado y, en caso de ser necesario, debe utilizar un spray de escaneado 3D. Una vez escaneado el objeto, es necesario procesar la nube de puntos. Esta parte del proceso es fundamental para conseguir una malla de calidad.

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